Qué y cómo se aprende
La educación primaria es una etapa cuya finalidad es proporcionar al alumnado un entorno de aprendizaje activo y vivencial que le permita iniciarse en la adquisición de las competencias básicas y en la construcción de sus fundamentos como persona. Uno de los aspectos importantes de esta etapa, continuando con la línea educativa iniciada en la etapa infantil, es la adquisición de unos buenos hábitos de trabajo y de convivencia, que contribuirán a desarrollar una educación integral propia en la que los valores serán la base de sus cimientos.
Todo el alumnado de primaria redacta su plan personal, en el que especifican los objetivos y actuaciones que le ayudarán a desarrollarse a partir de dos ejes fundamentales: la autoestima y el autoconocimiento. Se trata de dos aspectos importantes para participar activamente en el proceso de aprendizaje y de crecimiento personal. En primaria hacemos una evaluación continua e individualizada del proceso de aprendizaje de cada niño y niña y ellos, al mismo tiempo, su autoevaluación.
A través de diferentes herramientas, como el plan personal del alumno/a, y el feedback que hacen los y las maestras, el alumnado va desarrollando su autoconocimiento que le servirá para ir autorregulando su aprendizaje y para lograr un rendimiento satisfactorio.
La educación primaria es una etapa cuya finalidad es proporcionar al alumnado un entorno de aprendizaje activo y vivencial que le permita iniciarse en la adquisición de las competencias básicas y en la construcción de sus fundamentos como persona. Uno de los aspectos importantes de esta etapa, continuando con la línea educativa iniciada en la etapa infantil, es la adquisición de unos buenos hábitos de trabajo y de convivencia, que contribuirán a desarrollar una educación integral propia en la que los valores serán la base de sus cimientos.
La educación primaria es una etapa cuya finalidad es proporcionar al alumnado un entorno de aprendizaje activo y vivencial que le permita iniciarse en la adquisición de las competencias básicas y en la construcción de sus fundamentos como persona. Uno de los aspectos importantes de esta etapa, continuando con la línea educativa iniciada en la etapa infantil, es la adquisición de unos buenos hábitos de trabajo y de convivencia, que contribuirán a desarrollar una educación integral propia en la que los valores serán la base de sus cimientos.
El tipo de aprendizaje que hacemos en primaria es activo y se basa en la vivencia del niño y niña para que sea significativo. A partir de su entorno más cercano, de los conocimientos que va adquiriendo y de sus propias experiencias, aprende a poner en juego diferentes habilidades que le ayudan a desarrollar sus competencias y hacer sólidos los fundamentos de su aprendizaje. Por este motivo, consideramos muy importante estimularlos en la curiosidad y capacidad de hacerse auténticas preguntas para poder iniciar el desarrollo de su capacidad de gestión y la construcción de conocimiento desde una vertiente creativa.
Las competencias básicas que deben alcanzar los niños y niñas están organizadas en secuencias didácticas y se trabajan en diversos espacios de aprendizaje y agrupaciones que favorecen su interiorización: espacios de rutinas y sistematización a través de talleres; espacios de aprendizaje globalizado e interdisciplinario a través de los Proyectos y Science projects (aprendizaje basado en proyectos y retos reales) y los espacios de especialidades. Hacemos uso de la tecnología que está integrada de manera invisible en la cotidianidad de la escuela, lo que permite construir aprendizaje y compartirlo de una forma totalmente motivadora, en la que el alumnado se convierte en creador y no sólo usuario.
Los niños y niñas tienen un papel activo y fundamental en la vida de la escuela. Así pues, aprovechamos las dinámicas que establecemos para darles protagonismo para que intervengan de forma activa a través de encargos, en la toma de decisiones, valoraciones, propuestas, actuaciones… Unas tareas que contribuyen a hacer una escuela mejor e ir creciendo en implicación, participación, autonomía y responsabilidad. Entendemos que el aprendizaje en servicio es una herramienta clave que potencia el desarrollo de las propias habilidades y propicia la interiorización y consolidación del aprendizaje realizado. Por este motivo, facilitamos situaciones y agrupaciones variadas para estimularlo.
Consideramos básico el papel de las familias en los aprendizajes de los hijos e hijas, para lo que es necesaria su implicación activa, que la facilitamos trabajando conjuntamente y propiciando espacios y comunidades de aprendizaje. Asimismo, consideramos muy importante que las familias estimulen la curiosidad de los niños y niñas por las cosas y la realización de actividades, para poder tener experiencias enriquecedoras y motivadoras para fomentar una actitud abierta y disfrutar hacia el aprendizaje. Tutor o tutora y familia se encuentran trimestralmente para asegurar la coherencia educativa entre familia y escuela, tanto en el ámbito individual en las tutorías, como en las reuniones de familias.
